Turismo rural en Cantabria: qué ver

El turismo rural en Cantabria es una idea maravillosa, ya que es uno de los lugares más bonitos de España para visitar. Tiene lugares naturales maravillosos y también hay muchos pequeños pueblos encantadores que puedes visitar.

¿Qué ver en Cantabria?

1. Santander

Es una ciudad con muchos rincones bonitos, monumentos que ver y una gastronomía increíble. Te recomendamos pasear por el Sardinero, visitar los Jardines de Piquío y disfrutar de un atardecer en el Faro de Cabo Mayor.

2. Carmona

Si te gustan los rincones rurales de Cantabria, esta es una pequeña villa muy tradicional y con calles laberínticas que le dan un toque particular. Asimismo, cuenta con vistas panorámicas increíbles desde la Collada de Carmona.

3. Santillana del Mar

Es uno de los pueblos más bonitos de la comunidad autónoma y destaca especialmente por su colegiata del siglo XII. Te recomendamos pasear por el casco antiguo, ya que tiene mucho valor histórico y artístico. Si buscas alojamiento rural en Cantabria, aquí puedes alojarte en la posada Las Tres Mentiras, muy recomendable.

4. Valle de Liébana

Es uno de los lugares más visitados de Cantabria, especialmente porque en este valle se encuentra la iglesia mozárabe de Santa María de Lebeña, el monasterio de Santo Toribio de Liébana y el pueblo de Potes.

Gastronomía

Sin duda, hay una serie de platos y recetas que debes probar sí o sí en tu escapada rural a Cantabria. No te pierdas las rabas, el cocido lebaniego, el cocido montañés y la marmita de bonito. Además, los mariscos y pescados de esta zona, provenientes del mar Cantábrico, son de excelente calidad. Son también muy típicos los quesos cántabros, los sobaos pasiegos y la quesada.

En definitiva, estos son algunos de los mejores lugares que puedes visitar en tu viaje de turismo rural a Cantabria, aunque hay decenas de pueblos y ubicaciones que puedes disfrutar al máximo.

 

5 Rincones curiosos de Cantabria que seguramente no conocías

Suele decirse que Cantabria es una tierra infinita, llena de paisajes de cuento y experiencias por vivir. El norte de España tiene algo que no puede explicarse con palabras. Puede que sea su mar de intenso color azul, sus verdes paisajes o sus encantadores pueblos costeros, pero lo cierto es que en esta tierra se respira vida y capaz de dejar sin palabras a todo aquel que tenga la suerte de visitarla. Pero como sería imposible poder verlo todo durante unas vacaciones, a continuación te traemos una selección de rincones que no puedes perderte y que seguramente no conocías.

El nacimiento del río Asón en Cantabria

Pocas cosas hay tan maravillosas cerca de la carretera  como el nacimiento del río Asón. Un paisaje de incomparable belleza que no deja indiferente a ningún turista que tenga la suerte de pasar unos días en por la zona. El río Asón nace casi a 700 metros de altitud en el Portillo De Asón, en la boca de una cueva de la Peña de Azalagua en la localidad de Soba. Seguidamente se precipita en un salto de agua por una gran pared para discurrir entre pequeñas cascadas hasta el pequeño núcleo de Asón que actualmente cuenta con 22 habitantes y que tiene su enclave a 300 metros de altitud.

A lo largo de su recorrido, el río Asón pasa por bosques de especies caducifolias y hermosas praderas por las que se diseminan encantadoras casas rurales alegradas por el canto de las aves y por el tintineo del caminar de las vacas y caballos que viven en el Valle en situación de semilibertad. Entre bosques y formaciones de caliza nos vamos aproximando a la cascada que forma el nacimiento del río Asón. Colocarse debajo de la misma y admirar su grandiosidad supone una experiencia única.

Aquellos que estén interesados en llegar al lugar, deben saber que hay una pequeña excursión organizada que les llevará justo a la catarata. El paseo dura aproximadamente 3 horas entre ida y vuelta, pero realmente merece la pena.

El trayecto discurre por una carretera de unos 300 metros que termina convirtiéndose en un camino ancho, convirtiendo el paseo  en una auténtica aventura bajo los árboles, piedras llenas de musgo y el sonido del agua como sintonía de fondo. El escenario perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza en estado puro. Además, si puedes visitar la zona en época de lluvias, la imagen de la cascada impactando contra las rocas, resulta aún más espectacular.

 

Las 5 mejores playas de Cantabria

Cantabria  es una región ideal para descubrir pequeños paraísos de arena. Sus playas y pequeñas calas distribuidas a lo largo de 220 kilómetros de costa son un auténtico lujo para los sentidos que merece la pena visitar solamente por su belleza y el entorno en el que están situadas, incluso cuando el tiempo no acompaña. Hoy te traemos una selección de playas de Cantabria que en nuestra opinión son las mejores de la comunidad.

1. Merón

Situada en San Vicente de la Barquera, esta preciosa playa se encuentra a tan sólo 2 kilómetros del núcleo urbano, por lo que puede llegarse hasta ella dando un paseo. Se caracteriza por su arena blanca y fina y por su gran oleaje en días de viento, lo cual sabrán apreciar los amantes del windsurf.

2. Luaña

Se encuentra en la costa central de Cantabria, en la localidad de Alfoz de Lloredo. Un arenal pequeño y coqueto de 600 metros muy popular durante los meses de verano. pero lo más impresionante es el propio entorno, rodeada de praderas y masas boscosas y muy cerca de Cóbreces, un pequeño municipio de apenas 600 habitantes, pero con una gran riqueza patrimonial.

3. El Puntal de Somo

Situada en el municipio de Ribamontán al Mar, esta playa se encuentra en una lengua de arena enclavada en mitad de la bahía y rodeada de agua prácticamente por todas partes, ofreciendo unas vistas increíbles. ya que en días claros pueden verse incluso los Picos de Europa nevados mientras tomamos el sol

4. Covachos

Se ubica en la localidad de Soto de La Marina. Una playa nudista de apenas 500 metros cuadrados. Probablemente una de las calas más bellas de la costa cántabra pues además de la belleza del propio mar, se encuentra rodeada de cuevas y acantilados, ofreciendo unas vistas espectaculares.

5. Berria

Situada muy cerca de Santoña, entre los montes Brusco y Buciero, esta zona despierta un gran interés cultural y paisajístico. Un lugar ideal para los amantes del avistamiento de aves. Sin olvidar la gran riqueza monumental de Santoña que disfrutarán los aficionados al turismo cultural.

El Parque Natural de las Dunas de Liencres

Situado en el municipio de Piélagos en Cantabria, el Parque Natural de las Dunas de Liencres que cuenta nada menos que con una extensión de 195 hectáreas, se erige como un paraje de gran belleza. Se encuentra formado por dos calas y dos playas, la de Valdearenas y la de Canallave. La primera, la de Valdearenas dispone de un área de 98 km2 y es de arena dorada y fina. Una playa caracterizada por sus vientos y su fuerte oleaje, pero que resulta muy atractiva para el turista por su entorno agreste. Por su parte, la playa de Canallave cuenta con una franja algo más pequeña, de 11 km2. También se trata de una playa ventosa y de fuerte oleaje, por lo que resulta ideal para los amantes del surfing, con olas de recorrido no muy largo, pero muy intensas.

Detrás de las playas se encuentra la zona de las dunas, considerada una de las más importantes de todo el norte de España debido a sus interés geomorfológico, ya que presenta una características ecológicas y paisajísticas singulares. Éstas se crean por la acción del viento que reúne las arenas traídas por las corrientes litorales con las del río Pas.

Dentro de la zona de dunas podemos encontrar dos partes bien diferenciadas: las que han ido fijándose gracias a la presencia de ciertas especies vegetales como el junco de arena y el cardo marino; y la de las dunas móviles que se sitúa junto a la playa y que poco a poco ha ido ganando terreno hacia el interior por la acción del viento y que han quedado fijas desde 1949 gracias a especies forestales como el pino marítimo, lo cual ha logrado frenar su expansión. La zona de dunas cuenta con una política de protección muy restrictiva, pero eso no supone ningún inconveniente para poder disfrutar de cada rincón del parque.

Si decides visitar Parque Natural de las Dunas de Liencres, no dejes pasar la oportunidad de visitar la playa de Valdearenas y adentrarte en la masa forestal que la rodea y observar a las aves acuáticas, reptiles y mamíferos que viven en la zona y que aprovechan los momentos de bajamar. ¡Todo un espectáculo!