Situado en el centro del pueblo, en una casa de piedra centenaria, muy bien restaurada.
La familia que lo regenta lleva en torno a 30 años dando bien de comer a todo a quien se ha acercado a su mesa, ha sido totalmente restaurado hace 3 años, por tanto todas sus instalaciones están impecables, desde la cocina al comedor y además con buen gusto en decoración y presentación con todas las comodidades propias de este tiempo aire acondicionado, calefacción etc…
Trabaja tanto la carta como el menú del día, comida tradicional, casera, bien elaborada y en buena cantidad.
A la carta podemos disfrutar desde unas excelentes croquetas, un pescado salvaje a la plancha o al horno, a un buen guiso de carne, recientemente han introducido marisco.
Al menú y por solo 10 euros, nos ofrecen cada día 4-5 platos tanto de primero, segundo como de postre, con café incluido, muy bien elaborado, abundante y variado, nos pueden ofertar desde un cocido montañes, a unos puerros en salsa, pasando por una dorada o un revuelto, así como postres caseros.
Otra de las facetas a destacar es que es uno de los establecimientos de la zona que mejor prepara las copas y los combinados.
Dispone de un buen servicio, atento, cercano, y abiertos a recomendarte lo mejor del día algo de agradecer para aquellos que nos gusta todo y dudamos por que decantarnos.
En fines de semana, verano, puentes etc..se recomienda reservar, pues tiene mucha clientela.
Precio:
El precio del menú es muy bueno y competitivo con una relación de calidad muy buena, La carta igualmente dispone de buena calidad a un precio medio.
Opinión de la posada la Rivera de Escalante:
Es un buen restaurante, de los que gusta volver y gusta recomendar, buen producto y buen servicio, bien ambientado, en un pueblo bonito donde disfrutar de un agradable paseo junto al parque natural de las marismas de Santoña, Victoria y Joyel o por sus típicas calles para gastar las calorías de una buena comida.